

Algunos lectores y muchos amigos me hacen partícipe de su opinión en el sentido de no ‘meterme’ en política y, así, mantener al margen los pequeños artículos en que convierto las noticias que inserto en HOY-digital. Hasta el momento, he actuado conforme a esa directriz, pero los últimos acontecimientos y las certezas de las que nos proveen los últimos datos disponibles, me aconsejan cambiar de actitud. He aquí las reflexiones que me están llevando a ‘meterme en política’
ANTECEDENTES
No cabe duda, ni para mí ni para cualquier persona bien informada, que las más altas jefaturas del estado, del Rey hacia abajo, todos los que tienen alguna capacidad de mando, se han comportado y aún siguen actuando como asesinos conscientes o como tontos de capirote colaboradores necesarios. Me excuso de justificar las aseveraciones anteriores ya que están a disposición de toda personas que sepa leer y tenga el seso suficiente.
CONTEXTO
He de precisar, en primer lugar, que el ‘contrato social’ del pueblo con la estructura del Estado se ha roto. Y que ese Estado usa el poder que le otorga ese presunto ‘contrato social’ para cometer asesinatos múltiples deliberados aleatorios. Y, si no lo detenemos, seguirán matando a los más débiles, a los peor informados y, desde luego, a los que han sido abducidos por los medios de comunicación que, en su práctica totalidad, están al servicio de ese Estado asesino.
Por otra parte, antes de adoptar una posición respecto a la ‘política’, yo me pregunté ¿Qué tendencia política tiene Soros? O ¿Bill ‘el niño’ Gate? ¿Y la familia Ford o los Rockefeller? O, más modestamente, el insensato oligofrénico y megalomaníaco de Pedro Sánchez ¿tiene algo de socialista? En cuanto a los partidarios de Pablo ‘el comunista’ ya se ve cómo entiende el comunismo el cara dura por excelencia, aunque hay que reconocerle que jamás engañó a nadie.
Las dos razones anteriores me obligan, me hacen sentir obligado, a adoptar una postura ante el estado actual de cosas.
CONCLUSIONES
Los ciudadanos que estamos a nuestros asuntos, todos muy alejados de la política y nos hemos despreocupado de la ‘cosa pública’ al dar por sentado que ‘nuestros políticos’ ‘cuidarían de los asuntos comunes’ hemos sido engañados. Los políticos solo han cuidado de sus intereses y, además, lo han hecho sin empatía alguna hacia el pueblo, del que cobran y se benefician. Y como tal cosa no ha de suceder más, me parece imprescindible generar los mimbres que dé como resultado una ‘sociedad civil sólida, culta y combativa‘.
Y, por una SOCIEDAD CIVIL SÓLIDA, CULTA Y COMBATIVA lucharé yo desde mis modestísimas posiciones.
Y esa sociedad formada por ciudadanos libres conscientes de su poder como ‘sociedad civil’ (no como un ente estructurado, sino inorgánico y unido por el bien común instintivo) será un arma terrible para los políticos que, como nos enseña la experiencia, son unos personajillos deleznables… a la espera de que los que accedan a la política lo haga por méritos demostrados y que han de demostrar permanentemente.
Pero esto que dices está lejos de meterte en política, no veo ninguna inclinación. Aquí se pone de manifiesto que hay algo que no funciona en nuestras instituciones y como tal hay que hacer algo.
Gracias por poner luz en lo que sucede en este país.
Gracias🤓